Bari y la emoción del AC Milan. De Trizio: "Algunas noches, es importante poder divertirse".

BARI – El próximo domingo, bajo las luces de San Siro, Bari volverá a respirar el aire del gran fútbol. La primera jornada de la Coppa Italia enfrenta a los rojiblancos contra el AC Milan, en un partido fascinante que evoca recuerdos imborrables para quienes, como Giorgio De Trizio, vivieron esas emociones sobre el terreno de juego. El Meazza se prepara para recibir un auténtico éxodo de aficionados apulianos. Miles de ellos, dispuestos a vestir las gradas de rojo y blanco y a hacer sentir su apoyo incluso a cientos de kilómetros de casa. Numerosas "personas" como las que estuvieron presentes en los entrenamientos de ayer y esta tarde, y en el último entrenamiento mañana por la mañana, antes de la rueda de prensa de presentación de Fabio Caserta y su partida hacia Milán.
Sin embargo, tras la emoción de este lujoso viaje, persiste la sombra de una campaña de abonos. Es señal de un vínculo que debe fortalecerse y de la confianza que el equipo de Fabio Caserta deberá ganarse en el campo. A la espera de los movimientos que aún faltan en el mercado de fichajes, la atención se centra en los rostros más reconocibles de la plantilla: Nicolò Bellomo y Anthony Partipilo, símbolos de una "Bari-idad" capaz de encender el orgullo de la afición.
La próxima temporada de la Serie B promete equilibrio y batallas intensas. Para el Bari, que viene de una temporada irregular, el reto será encontrar la consistencia y la constancia, evitando los costosos tropiezos que se pagan caro en una liga tan competitiva. De Trizio, experto en temporadas difíciles, sigue con ojo experto los movimientos de la directiva y es abierto sobre sus expectativas respecto a los refuerzos que puedan incorporar.
Entre recuerdos de partidos legendarios contra los Rossoneri y análisis del presente, el ex icono biancorossi nos lleva en un viaje que une pasado y futuro, emoción y realismo. Porque el Milán-Bari, independientemente de los pronósticos, sigue siendo una historia que te emocionará.
Entrenador De Trizio, la primera ronda de la Copa Italia se juega en San Siro el domingo. ¿Qué tipo de partido espera y qué retos le augura al Bari contra el Milan?
Independientemente de las fortalezas del equipo, para causarle problemas a un equipo como el Milan, es necesario presentarse con un equipo consolidado, con una mecánica de juego bien engrasada. Me parece que el Bari aún está en desarrollo, a pesar de que han llegado algunos refuerzos del mercado de fichajes. Para ver siquiera un mínimo de equipo de verdad, tendremos que esperar al menos un mes y medio. El domingo se presenta muy complicado, sobre todo dada la fuerza de sus rivales. Incluso en el Milan, hay nuevos jugadores que querrán brillar y causar sensación contra un Bari de una división inferior. No sería fácil para nadie, ni siquiera para la Juventus. Son tardes en las que aún se puede disfrutar porque, como siempre es fútbol de verano, cualquier sorpresa puede surgir. Como ocurrió en el primer año de De Tommasi, cuando marcó para superar al Inter de Altobelli y Zenga.
Se habla de un éxodo de aficionados rojiblancos al Milán. ¿Qué impacto crees que tiene esta cálida afición en un estadio tan prestigioso?
Es una señal clara de que la afición no abandona al equipo. Nunca lo ha hecho y no lo hará este año, sobre todo fuera de casa. Las protestas, me imagino, serán más intensas en casa.
La campaña de abonos está registrando cifras inferiores a las esperadas. ¿Qué cree que ha influido más en esta tibia respuesta?
Dado el mercado de fichajes algo lento, no parece haber un interés real en que las cosas salgan bien. En Nápoles, se hace mucho. En Bari, casi nada. El equipo podría sufrir la frialdad de la afición. Es decepcionante, porque jugar ante tantos espectadores es una cosa y ser abucheado al primer error es otra. No creo que el San Nicola se quede casi vacío. Los barienses son fieles a sus costumbres; les encanta ir al estadio a pasar tiempo con los amigos. Al final, la convicción prevalecerá sobre la protesta. Cabe destacar que las decisiones recientes del club han sido erróneas, tanto a nivel directivo como técnico, por así decirlo. Las decisiones que toman no respetan a la ciudad de Bari.
Te has enfrentado al Milan varias veces en tu carrera. ¿Qué partido te ha impresionado más y por qué?
Recuerdo a campeones como Gullit, Van Basten, Rijkaard y Maldini. Cuando entraste en el San Siro, eran impresionantes: bestias físicas y monstruos técnicos. ¿Cómo olvidar el partido de la Coppa Italia contra los Rossoneri en el primer año de Sacchi? Enrico Catuzzi estaba en el banquillo. Era el 23 de agosto de 1987 y perdimos 5-0. A pesar de la derrota, jugamos un gran partido. Al final, el entrenador Janich estaba encantado y nos felicitó. En aquellos tiempos, el Milan ganaba con creces contra todos.
¿Hay alguna anécdota en particular, vinculada a algún partido contra los rossoneri, que te gustaría compartir?
Sí, el del 5 de enero de 1986. Empatamos 0-0 fuera de casa, y tuve que marcar a Mark Hateley porque Loseto fue expulsado por segunda tarjeta amarilla. Fue una hazaña. Lo señalé fuera de juego al menos veinte veces. Él pateaba el balón e inmediatamente se metía en el área a recibir un centro. Yo hice lo mismo. Parecía demasiado fácil, y nunca entendí cómo lo conseguí con tanta facilidad.
El equipo actual de Caserta cuenta con dos jugadores con fuertes vínculos con la ciudad: Bellomo y Partipilo. ¿Qué impacto tendrá ser casertano en la próxima temporada?
Los conozco bien. Son dos de mis protegidos. Fuertes y forjados con el tiempo, sin ningún don de nadie. El brazalete de capitán le pertenece a Bellomo, al menos cuando juega. O, al menos, debería estarlo en el vestuario, donde debería tener más voz y voto que los demás. Entrené a Nicola durante un año con la sub-17, pero tenía un problema de rodilla. Partipilo, en cambio, fue entrenado por Giovanni Loseto. Lo he visto crecer, dando pasos agigantados. Estamos hablando de un jugador de élite en la categoría. Podrá marcar una gran diferencia.
¿Cómo juzgas los movimientos del Bari en el mercado de fichajes hasta ahora?
Contamos con jugadores de primer nivel que nos ayudarán a repetir el éxito de la temporada pasada. Con una reestructuración, sin embargo, se puede tener suerte. Pero si no sale bien, habrá que recurrir al mercado de fichajes de enero para reparar el daño.
En tu opinión, ¿qué roles o perfiles aún son necesarios para que el equipo sea más competitivo?
Necesitamos un defensa central con personalidad. Uno realmente fuerte. Un centrocampista con capacidad de juego como Totò López y un delantero con mucha personalidad como Lele Messina. No veo ese perfil ahora mismo. Gytkjaer es bueno, pero está envejeciendo. Necesita a alguien que le quite todo el peso de encima en ataque.
El próximo campeonato promete ser equilibrado y desafiante: ¿hasta dónde puede llegar realmente el Bari?
Ahora mismo, si todo va bien, podrían terminar en mitad de la tabla, justo antes de los playoffs. De lo contrario, sin los refuerzos necesarios, tendrán que luchar para evitar el descenso.
¿Qué consejo o ánimo daría a la afición rojiblanca en vísperas de una temporada tan importante?
El equipo nunca debe sentirse solo. Los dueños son la familia De Laurentiis, pero Bari pertenece a los barienses y representa a la ciudad.
La Gazzetta del Mezzogiorno